viernes, 14 de marzo de 2008

Aleteo

Algo aleteó débilmente entre los pliegues de la mente –¿o era la cortina de la ventana?– y parecía que sí, que por fin lo lograría, que el vuelo iba a tener la forma y la velocidad deseadas como para despegar y tomar altura. Pero la forma era muy pesada, o tenía mucho miedo, o el cansancio y el olvido le desdibujaron las alas, y una vez más quedó oculta, irreconocible, en estado de quietud absoluta. Y nunca se supo si era una mariposa o una metáfora.

2 comentarios:

Eduardo Abel Gimenez dijo...

Era una enseñanza.

;)

Luisa Axpe dijo...

Si era así, es una suerte que no haya levantado vuelo.