Algunos textos de este blog forman parte de un libro que estoy escribiendo. Hoy, al buscar para mí misma la explicación de por qué los publico aquí, me acordé de una costumbre de hace algunos años, cuando el vendedor de una tienda nos invitaba a acercarnos a la puerta para apreciar mejor el color de una seda o un terciopelo a la luz del día.
Ver partes de ese libro a la luz del blog me sirve para observarlos desde otro ángulo y seguir trabajando con ellos mientras siguen estando vivos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario